Luchador de WWE sigue en activo en su sitio web tras 762 días sin competir
- Vicente Beltrán
- 1 hour ago
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Será miembro del Salón de la Fama pero debería aclarar su futuro
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Desde el fin de semana, WWE ha intensificado su política de recorte de personal, lo que ha dejado fuera de la empresa a varias figuras prominentes del elenco actual. Sin embargo, un nombre ha sorprendido a los fanáticos por permanecer silenciosamente en la lista oficial del roster activo: Shane McMahon.
WWE: Shane McMahon, ¿descuido o estrategia?
El 2 de mayo, WWE —bajo la dirección creativa de Paul “Triple H” Levesque— realizó una limpia considerable que incluyó la salida de luchadoras como Dakota Kai, Shayna Baszler y Cora Jade, todas con participaciones relevantes en el pasado reciente de la compañía. Este movimiento se enmarca dentro de una estrategia de reducción de costos que ya había comenzado con nombres como Sonya Deville o The Good Brothers (Luke Gallows y Karl Anderson) fuera del panorama desde febrero.
A pesar del ajuste masivo, Shane McMahon —hijo del exmandatario de WWE, Vince McMahon— sigue apareciendo oficialmente en la sección de luchadores activos del sitio web de la compañía. Lo curioso es que su última aparición data de WrestleMania 39, celebrado en abril de 2023, donde protagonizó un caótico e improvisado enfrentamiento contra The Miz. En ese combate, Shane sufrió una grave lesión: una rotura de cuádriceps, que lo dejó fuera de combate inmediatamente. Fue entonces cuando el rapero Snoop Dogg, presente en el evento, improvisó para salvar el segmento, aplicando un “People’s Elbow” y llevándose la victoria en una de las escenas más virales del evento.
Desde ese episodio, Shane McMahon ha estado ausente de los programas semanales y no ha sido mencionado públicamente por la compañía. Sin embargo, fanáticos atentos notaron recientemente que su perfil continúa activo, al igual que el de luchadores como Shawn Spears y Sheamus. Este detalle ha alimentado rumores en redes sociales sobre un posible regreso o una omisión administrativa.
Además, en meses pasados circularon especulaciones de que Shane podría estar en conversaciones con All Elite Wrestling (AEW), tras ser visto en compañía de su CEO, Tony Khan. Aunque nunca se confirmó una negociación formal, la posibilidad de que McMahon cruzara las fronteras de WWE provocó reacciones intensas entre los seguidores de la lucha libre.
Una WWE en transformación
La ola de despidos también ha generado controversia por la manera en que algunos talentos fueron evaluados antes de ser cesados. Según el periodista Dave Meltzer, de Wrestling Observer, fuentes internas le informaron que varios de los talentos despedidos de NXT fueron catalogados como "faltos de esfuerzo" durante sus entrenamientos.
“Muchos de los que fueron cortados eran percibidos como personas que no trabajaban duro en los entrenamientos. Y si no trabajas duro, hay mucha gente que sí lo hace. Vi que se usó el término ‘perezoso’. Los que son perezosos se irán, y los que no destacan también.”
Dave Meltzer, Wrestling Observer
Estas declaraciones encendieron las redes sociales. La exluchadora conocida como Gigi Dolin (Priscilla Kelly), quien también fue recientemente liberada de su contrato, respondió directamente a través de sus redes sociales para rechazar esas insinuaciones comentadas por Dave. Su mensaje fue respaldado públicamente por Cora Jade, otra de las afectadas por los recortes, lo que refuerza la sensación de malestar entre varios talentos por la forma en que se justificaron sus despidos.
El panorama actual de WWE está marcado por una intensa transformación interna. Desde que Endeavor tomó el control corporativo a través de la fusión con UFC para formar TKO Group Holdings, se han impulsado decisiones de tipo financiero que impactan tanto en la plantilla como en la dirección creativa. La permanencia de Shane McMahon en el roster, pese a su inactividad, y la salida de talentos activos con recorrido como Shayna Baszler, reflejan una compañía en proceso de redefinición de prioridades. Mientras tanto, luchadores jóvenes con proyección, como Dakota Kai o Cora Jade, ahora deben buscar nuevos horizontes tras una etapa que, en muchos casos, no cumplió con el potencial anticipado.
¿Es Shane McMahon un simple olvido administrativo en medio del reordenamiento, o WWE tiene planes futuros para su regreso? Y más allá de eso: ¿está la compañía valorando realmente el esfuerzo de sus talentos o simplemente aplicando filtros corporativos en tiempos de ajuste? Las próximas semanas podrían arrojar más luz sobre este escenario incierto ¿Qué opinas tú: debería Shane McMahon regresar a los cuadriláteros o es momento de cerrar definitivamente ese capítulo?
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